Muchas veces, nos vemos frustrados por no conseguir cumplir las metas que nosotros mismos nos imponemos. Planeamos muchas cosas y no las hacemos hasta el final.
Este proceso se da de manera equivocada sin que nos demos cuenta. Las enseñanzas de la coach Sandra Mateus Guerrero en “Metas efectivas” es mostrarnos cómo es fundamental poner en el papel todo lo que queremos para que podamos conseguirlo.
En esta oportunidad aprendimos -en sólo diez sencillos pasos- cómo poner en práctica los planes para alcanzar nuestras metas, sin sueños gigantescos, con la habilidad de hacerlas parte de nuestra realidad. Si sigues cada uno de estos pasos, tu crecimiento será visible.
Paso 1: Importancia de las metas en nuestra vida
La autora deja en claro que el primer paso es saber la importancia que tienen las metas en nuestras vidas. Si no las tenemos, volamos sin dirección y nos sentimos fuera de control.
No podemos controlar lo que está fuera de nosotros, sólo lo que está en nuestras manos.
Tener metas nos permite concentrarnos en lo que queremos lograr, cuáles son las prioridades y que es de facto importante. Nos permite saber a dónde queremos ir, nos da motivación para saber que nos deja más animados y nos proporciona un propósito para que la vida tenga sentido.
Mateus realizó una lista con afirmaciones y dudas sobre las metas que puedes expresar:
1. Cuando me pongo metas tiendo a abarcar más de lo que realmente puedo hacer.
2. Ponerme metas me hace sentir agobiado, como con una camisa de fuerza.
3. No puedo pensar en el futuro, prefiero vivir el día a día.
4. Para qué me pongo metas si luego no las cumplo.
5. No sé cómo se fijan las metas.
6. Lo que no se planea sale mejor, necesitamos ser más espontáneos.
¿Ya dijiste alguna de estas afirmaciones? ¿Qué sensaciones te generan cada vez que las escuchas?
Mientras que también enlistó a los diez mayores errores al definir una meta. Debes tenerlos en cuenta a partir de ahora:
1. Miedo a elegir y a renunciar, pues cada elección es una renuncia.
2. Falta de claridad en los objetivos y metas.
3. No tener clara una escala de valores.
4. Dejarse llevar por las presiones de tiempo.
5. Quedarse en los planes y no actuar.
6. No tomar en cuenta el impacto de la decisión en quienes están alrededor.
7. Buscar resolver los síntomas y no las causas.
8. No determinar las creencias y paradigmas que han marcado las decisiones a lo largo de la vida.
9. Fallar en la forma de comunicar la decisión a quienes están involucrados en ella.
10. No detectar conexiones o modelos con otras situaciones existentes.
Paso 2: Los logros, un aprendizaje
Muchas veces somos muy duros con nosotros mismos y solemos enfocarnos en nuestros errores o experiencias negativas, explica la coach.
Eso nos lleva a no darnos cuenta de nuestros logros, ya sean grandes o pequeños. Logramos cosas todo el tiempo y es normal no prestar atención.
Las creencias sobre falsas modestias nos impiden reconocer lo que hacemos bien. En otros casos reconocemos nuestros resultados, pero no los valoramos lo suficiente pues los comparamos con los de otras personas.
En ocasiones estamos tan concentrados en alcanzar nuestros grandes sueños que no celebramos las pequeñas conquistas obtenidas en el camino.
Revisa tus logros y ve qué actitud tuviste con ellos. Sea cual sea la actividad ejercida, intenta recordar cómo reaccionaste ante ellos.
Haz una lista de todos los logros para que, en el próximo paso, puedas reconocerlos.
Paso 3: Reconoce tus fortalezas como tus aliadas
El tercer paso de estructuración efectiva de metas te exige reconocer todo lo que fuiste capaz de conseguir.
Mateus sostiene que debes considerar como fortalezas las cualidades positivas que tienes, es una ventaja que te ayudará a alcanzar todo lo que te propongas.
Por otro lado, las debilidades se refieren a todas tus desventajas o a la dificultad para avanzar en lo que quieres.
Un paso fundamental dentro del proceso que estás empezando es ubicar tus fortalezas y debilidades, saber cuáles son las principales amenazas rumbo a la conquista de tu objetivo.
Así, las cosas estarán más claras y podrás comprender mejor qué hacer para llegar hasta donde quieres.
Paso 4: Es hora de recibir gratificaciones
Después de reconocer tus fortalezas llegas a una parte muy gratificante, dónde recibirás una retroalimentación que te va a generar emociones positivas.
La autora recomienda que elijas a cinco personas, pueden ser amigos, compañeros de trabajo o familiares, que te conozcan bien y cuya opinión respetes. Debes pedirles a cada una de ellas una lista de las fortalezas que ven en ti.
Luego, verás que las respuestas te harán sentir muy bien y podrás saber cuáles son las características que más respetan de ti.
Esto es importante para tener conciencia de cuáles son tus mayores cualidades para usarlas a tu favor.
Revisa la lista y responde si estás de acuerdo o no con ella, seguido a esto recibe gratificaciones cuando alcances tus metas.
Paso 5: ¿Debilidades o puntos a mejorar?
Generalmente llamamos debilidades a lo que podemos denominar puntos a mejorar, cuenta la coach.
La palabra debilidad tiene una connotación negativa oculta que no percibimos, por ello debemos cambiar nuestro pensamiento y referirnos a ella de manera positiva.
Los puntos por mejorar nos dan espacio para la acción, nos hacen asumir riesgos y nos dejan comprometernos con nuestra identidad. Son parte de nosotros, pues nacen de las propias fortalezas.
Ser cauteloso y analítico hace que podamos ejercitar estos puntos de la mejor manera posible.
Paso 6: Hora de construir una visión poderosa
Visualízate en el lugar que más te transmita tranquilidad. Según la escritora, ese espacio que te da paz es el ideal para comenzar a trabajar en la estructuración de una visión fuerte que requiere la meta para la cual trabajas actualmente.
La declaración del éxito es una de las herramientas más fuertes para crear nuevas realidades. Si aceptas algo que te comprometes a vivir con intensidad, verás cómo alcanzas los resultados.
Ser una persona que nombra más el “sí” que el “no” te hará mirar los resultados a partir de tus metas de otra manera.
Si compartes con tu familia y con las personas más cercanas tus objetivos, te verán como alguien que trabaja rumbo al éxito. Si sólo les hablas de tus preocupaciones, no tendrás la imagen de alguien que suele conseguir las cosas.
Concéntrate en visualizar de la manera más positiva posible tus sueños y metas.
Paso 7: ¿Cuál es la realidad de la que parto hoy?
La “Rueda” es una de las herramientas más sencillas del coaching para realizarse.
Tal como explica Sandra, la Rueda de la Vida es una representación gráfica del nivel de satisfacción frente a determinadas áreas.
Imagina un círculo dividido en varios pedazos pequeñitos. Pon allí ocho campos de tu vida: pareja, trabajo, ocio, familia, salud, finanzas, espiritualidad y desarrollo personal. Puedes colocar más cosas si quieres.
Entonces asigna una puntuación del 1 al 10, donde el grado 1 es muy bajo y el 10 significa que estás muy satisfecho con ese campo.
Ahora tendrás una mejor condición para evaluar cómo está tu vida en cada uno de estos campos.
Paso 8: Técnica SMART
Revisa tu rueda construida en el paso anterior y formula objetivos para cada una de las áreas.
Para Sandra Mateus la manera más efectiva y conocida para alcanzar las metas es el llamado método SMART, cuyas letras son una sigla en inglés que define la mejor manera de establecer metas para cada uno de nosotros.
La técnica SMART sigue cinco características descritas a continuación:
• Specific (específica): Las metas deben ser específicas, detalladas, para saber que quieres. De nada vale, por ejemplo, entrar en un taxi sin saber a dónde quieres ir. La especificación nos acerca al final del camino. Deja la meta mucho más específica y tendrás más oportunidades de conseguirla.
• Measurable (medible): Las metas no se alcanzan, en la gran mayoría de los casos, porque no se establecen desde un comienzo indicadores claros de cumplimiento, y no se mide el progreso. Para estar seguro de que están cerca es fundamental establecer criterios claros de cumplimiento. Si no las puedes medir, no sabes dónde y cómo están.
• Attainable (alcanzable): El riesgo de frustración por no alcanzar una meta disminuye si planeas y analizas con detalle la mejor manera de hacerla realidad. La formulación de la meta debe basarse también en las fortalezas, habilidades, recursos y hábitos para que se pueda emprender la misión de una nueva meta.
• Realistic (realista): Aunque queramos alcanzar grandes metas en la vida, también es importante tener en cuenta que las metas deben ser realistas y posibles de alcanzar. Una meta realista no depende de la suerte o de factores externos, pues eres tú el único que decide su tamaño. Es fundamental que dispongas de tiempo y recursos para alcanzarla.
• Time (tiempo): La meta es un sueño con una fecha fija para su cumplimiento. Al fijarse un horizonte claro de tiempo, hay una mayor oportunidad de cumplimiento y aumenta, mucho más de lo que imaginas, la posibilidad de que la meta se convierta en realidad.
Paso 9: Definir brechas
Después de decidir el camino para el cumplimiento de las metas, una de las técnicas del coaching es tener en cuenta la concientización de las brechas o vacíos que debemos atravesar para alcanzar lo que queremos. Debemos pasar del punto A al punto B donde queremos llegar.
Sandra Mateus explica que las brechas van desde el aprendizaje, los recursos y las creencias hasta llegar a la acción.
Debemos trabajar muy bien cada una de ellas para comprender mejor que los problemas pueden surgir, pero deben ser superados con fuerza y determinación.
Paso 10: Que no te atrapen las anti metas, enemigos ocultos
Los enemigos ocultos, o anti metas, son obstáculos fundamentales que hay que tener en cuenta en el camino rumbo al cumplimiento de las metas.
Normalmente pueden aparecer cuando te propones algo, sostiene la autora.
Es como si el universo pusiera a prueba tus ganas de conquistar estas metas. Aparecen en tu camino los olvidos, la falta de compromiso, los sabotajes, el miedo al cambio y la procrastinación.
Cada vez que te olvides de estos enemigos, das una oportunidad para que ellos vuelvan y te alejen del objetivo. Y cada vez que caes en ellos, se alejan las metas.
La atención constante es fundamental.
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